Su enseñanza está dividida en 4 niveles y cada nivel se enseña en un curso de un día, o unas horas. Cada nivel tiene un objetivo concreto.
El primer nivel, es conocido como el despertar. Aprendemos a trabajar con la energía reiki a nivel físico y despertamos a un mundo nuevo de sensaciones.
El segundo nivel, es el denominado la transformación, y comenzamos a trabajar con la energía a nivel mental-emocional. Los niveles 1 y 2 son como las 2 caras de una misma moneda, algo así como yin/yan. Se complementan y completan. También en este nivel aprendemos a enviar energía a distancia.
El tercer nivel es conocido como la realización, es nuestra maestría interior. Es un nivel que llama a la acción para convertirnos en los protagonistas de nuestra propia vida.
Y el cuarto nivel es el denominado Maestría, para aquellos que deseamos compartir el Reiki a través de la enseñanza.
Reiki es, asimismo, un camino de desarrollo y crecimiento personal. Nos ayuda a conectar con nosotros mismos, con nuestra esencia. Te cuento mi experiencia personal de transformación en el libro “Mi vida con reiki –suena un bucle de vida en las estrellas”.