A orillas del río Piedra
… me senté y lloré. Este es el título completo del libro escrito por Paulo Coelho, que da también nombre a esta nueva entrada.
Este pasado mes de agosto lo releí. Recordaba algunas cosas de cuando lo leí por primera vez hará ya unos veinte años, pero fue casi como leerlo de nuevo. Emociones, sentimientos volvieron a aflorar.
Y lo hice de una forma diferente. No me limite a leer la novela y a disfrutar con ella. Quise hacerlo de una forma más consciente, más reflexiva, buscando más allá de sus líneas, de sus palabras.
Compartir es vivir
Y siguiendo el lema de esta web, hoy os queremos compartir esas preguntas que surgieron. Porque además tienen que ver con lo que José está estos días hablando en instagram. Sobre relaciones. Sobre el amor.
Entre «comillas» os copiamos lo literal de «A orillas del río piedra me senté y lloré».
«… nunca debemos olvidar que una experiencia espiritual es sobre todo una experiencia práctica del Amor. Y en el amor no existen reglas.».
Entonces… ¿De dónde proceden estas reglas o condicionamientos que nos dicen cómo pensar cuando sentimos algo determinado?
«Pero no. No puedo. No quiero.»
– ¿Confundimos ambos verbos?
«El Otro es aquel que me enseñaron a ser, pero que no soy yo. El Otro cree que la obligación del hombre es pasar la vida entera pensando en cómo reunir dinero para no morir de hambre al llegar a viejo. Tanto piensa, y tanto planifica, que sólo descubre que está vivo cuando sus días en la tierra están a punto de terminar. Pero entonces ya es demasiado tarde.»
– Soltar al Otro es desapego.
– Practicar la observación de mí «otro».
«Todas las personas sobre la faz de la Tierra tienen un don —dijo—. En algunas ese don se manifiesta espontáneamente; otras necesitan trabajar para encontrarlo. (…) Ese don es de quien quiere aceptarlo. Basta con creer, aceptar, y no tener miedo de cometer algunos errores.» (…) «Aceptar el don. Entonces el don se manifiesta.»
– ¿Intuyes o conoces tu don? ¿Lo temes? ¿Lo añoras?
«Dios nos quiere ver felices. (…) … si admitimos que Dios nos creó para la felicidad, tendremos que asumir que todo aquello que nos lleva a la tristeza y a la derrota es culpa nuestra».
– ¿Puedo reconocer esa Verdad?
«-La vida te enseñó muchas cosas -dije, tratando de iniciar una conversación.
– Me enseñó que podemos aprender, me enseñó que podemos cambiar —respondió él—. Aunque parezca imposible.».
– Si miro un año hacia atrás, ¿cómo he cambiado? ¿Y si miro 3, 5, 10 años atrás, qué retos, miedos he superado? ¿Qué sueños he cumplido?
«El amor se descubre mediante la práctica de amar.»
– ¿Es tu deseo realmente amar? ¿Tenemos resistencias? ¿Cómo puedo vencerlas? ¿Cuál sería el resultado a corto y largo plazo de NO manifestar el amor en nuestra vida cotidiana?
– ¿Qué es la vulnerabilidad? ¿Cómo nos volvemos vulnerables? ¿Mostrando nuestros sentimientos, pidiendo ayuda cuando la necesitamos? ¿Ocultarnos de los demás nos hace realmente más fuertes? ¿Y ocultarnos a nosotros de nosotros mismos, a qué nos conduce? ¿Qué evitamos? ¿Qué queremos evitar, ahuyentar?
Preguntas vs. Respuestas
Sí, quizás son muchas preguntas y no se responden en un abrir y cerrar de ojos. Pero si esta lectura te ha removido algo, toma papel y lápiz y comienza a pensar. Si tienes contigo la agenda Ahora Yo Soy 2019, puedes volcar tus reflexiones sobre cada pregunta en la misma.
Un día una pregunta; otro día otra pregunta.
Y es que hay años que nos dan las preguntas y otros que nos ofrecen las respuestas.
Y para las del año 2020, tienes ya disponible la nueva agenda AQUÍ. Para ti y para regalar. Así como para tus citas, tus reflexiones y notas. Pues este año, hemos incorporado unas hojas al final para ese fin.
2 comentarios en «A orillas del río Piedra»
Grandes preguntas que merecen ser meditadas antes de responder. Me apunto el libro, para no variar 😉 Gracias
Estaremos encantados de que nos puedas compartir tus reflexiones. Feliz semana.